EL PARQUE MARÍTIMO TERRESTRE DE LAS ISLAS ATLÁNTICAS DE GALICIA.

Un rosario de islas e islotes tendidos de norte sur frente a las Rías Baixas de Galicia y un espacio marítimo delimitado de su entorno, constituye el Parque Natural de las Islas Atlánticas. Cuatro archipiélagos, Cíes, Ons, Sálvora y Cortegada, cumbres y crestas rocosas que emergen sobre los fondos marinos de una cordillera sumergida en el mar y alineada a modo de pantalla entre el litoral continental y el anchuroso océano. Su peculiar disposición de alargada y estrecha barrera determina dos contrapuestas vertientes en su exposición a los agentes atmosféricos y confiere características propias el medio natural, diversificando la riqueza de sus ecosistemas marítimos y terrestres, dotándolos de un elevado valor ecológico. A poniente una fachada granítica de cantiles y de acusadas pendientes, batida por el oleaje, los fuertes vientos y la violencia de los temporales; mientras que a sotavento, cara a tierra mirando al amplio valle sumergido de las rías, las fuertes corrientes apaciguadas depositan finas arenas que dibujan deliciosas playas abiertas en forma de media luna, al amparo de aguas sosegadas y cristalinas. Tierra, peñascos, cantiles y limpias playas en la alternancia de calas, arrecifes y rompientes en sus recortadas orillas, configuran el paisaje isleño modelado por el viento y el mar, el mar eterno y luminoso, su pureza e intenso azul, como esencia y contrapunto.

Tierra, roca y agua.- La variada y compleja morfología terrestre y marítima del ámbito del Parque, la vida inducida por la insularidad y la permanente influencia del mar, dotan de una inmensa riqueza natural a estos espacios protegidos y que, junto con el archipiélago de Cabrera en Mallorca, es uno de los dos Parques Nacionales Terrestre Marítimos. Las formaciones de resistente roca granítica que estructura los archipiélagos, el viento, la acusada pendiente de las laderas, suelos diferentes y la permanente salinidad, son los elementos básicos en los que se desarrolla una vegetación y fauna rigurosamente seleccionada, de especies vegetales y endemismos, tras la selectiva aclimatación a un medio adverso de condiciones excluyentes. Y, en cuanto al medio marino, oculto a la mirada bajo su movediza superficie, la colorista y vivaz naturaleza de las profundidades es el albergue de miles de especies y el lugar más desconocido para el hombre. Fondos rocosos o de arena, desiguales profundidades en una desnivelada orografía submarina y la influencia interrelacionada del mar abierto y las recogidas rías, proporciona la variedad de hábitats y factores de elevada biodiversidad básicos para el desarrollo y establecimiento de múltiples comunidades piscícolas y vegetales. Por su relevante valor ecológico, paisajístico y culturalmente arraigado con la economía, tradiciones y raíces gallegas, el ámbito marino es el de mayor extensión protegida del Parque.

La vida en los acantilados: La inaccesibilidad de los relieves marinos dota de protección natural a la avifauna, el mundo animal mejor adaptado al severo espacio de las verticales, en un relieve donde guarecerse y que los pone a salvo de los depredadores terrestres. Vivaces colonias de avifauna, miles de aves posadas o en vuelo, convierten la aspereza mineral de los acantilados en reductos llenos de vida. Reposo y refugio en el roquedo, donde, como es habitual, son dominantes las gaviotas en sus variadas especies, siempre presentes por su capacidad de convivir con el hombre. La llamativa gaviota es por excelencia el inquilino de los abruptos frentes marinos, las aves más numerosas y fáciles de ver, en reposo o evolucionando entre las rocas, el mar y el cielo, con sus gritos armonizados con el incesante rumor del oleaje, sonidos conciliados que forman parte en nuestro imaginario de las tierras que miran al mar. Los cormoranes, alcatraces y otras especies, conforma colonias de importancia internacional, junto a la fauna terrestre, comunidades cuya particularidad proviene de su aislamiento, sin intercambio con la fauna continental en un medio ambiente que ha permitido la conservación de características propias. El Parque cuenta con la consideración ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves).

La presencia humana en los archipiélagos.- Desde la Edad del Bronce hasta mediados del siglo XX las islas estuvieron habitadas. Por distintos motivos estos territorios fueron ambicionados y poseídos por nobles, la iglesia y el ejército. Desde la Prehistoria existen testimonios de la presencia estable del hombre en las islas: celtas, romanos, en la Edad Media…y, de manera ocasional y como estratégico refugio en las calas, al abrigo de los fuertes temporales atlánticos, se ocultaron piratas, corsarios e invasores, incursiones normandas y vikingas, en anclajes de conveniencia como base de operaciones para las expediciones de conquista y saqueo. Castros pre romanos y romanos, monasterios de la Edad Media, ermitas, fortificaciones…, los faros y su control por fareros y sus familias, pequeños poblados de agricultores y pescadores en régimen de supervivencia, son testimonios de la historia del hombre asociada a la penuria isleña a lo largo de siglos. En varias ocasiones sus habitantes tuvieron que abandonarlas buscando el amparo continental que no tenían en sus lares de origen. En la actualidad solamente la isla de Ons mantiene una escasa población permanente: no es fácil convivir con el largo invierno atlántico. En otros lugares, la presencia humana en las islas ya es solamente de carácter estacional y en función del turismo.

La dependencia al medio natural en la supervivencia, el aislamiento y un clima adverso ha determinado formas de vida culturalmente propias, en las que se integran creencias y supersticiones fomentadas por la soledad social de las pequeñas comunidades. En las aguas entorno de los archipiélagos de un mar difícil, naves hundidas, embarcaciones de todo tipo a lo largo de los siglos, encontraron el fin de sus singladuras en los peligrosos bajíos rocosos. Un cementerio de barcos en los frentes rocosos, acantilados y rompientes, escollos que han sido la tumba de muchos marinos. La última y trágica reseña del drama del mar fue el hundimiento del petrolero Prestige, el 18 de noviembre de 2002, el mismo año en el que se inauguraba el Parque. El fuel liberado en el naufragio, de alta densidad y viscosidad, extendió la desolación sobre la pureza del mar, la pesadumbre y la degradación de los paisajes marinos y la ruina de muchas personas que perdieron en el desastre su medio de vida. La limpieza fue la actuación prioritaria llevada a cabo en distintas actuaciones, básicamente realizada a mano y en parte sostenida por la desinteresada actuación del voluntariado. En la actualidad solamente quedan manchas de fuel solidificado, una mínima superficie en fondos marinos, ocultas a la mirada, mientras que el extenso espacio terrestre marítimo del Parque ha recuperado la belleza e integridad de sus paisajes y la animada vida de sus ecosistemas, valores ahora al cuidado de un competente equipo que lleva a cabo su cometido con profesionalismo y entrega vocacional.

Al paso del tiempo las islas han cambiado de dueño y de administraciones, hasta los momentos actuales en los que, desde el año 2000, en su conjunto ha pasado a ser Parque Nacional Marítimo Terrestre. Una consideración restauradora y conservacionista de normativa institucional proteccionista, de sensibilización y respetuosa relación del ciudadano con el medio natural y el legado cultural depositado en este valioso ecosistema Atlántico. El conjunto de los cuatro archipiélagos son ahora un espacio de acogida ciudadana, de enseñanza y de concienciación. Después de su larga historia humana, no siempre pacífica, la belleza de sus paisajes, la riqueza viva del medio y el patrimonio cultural humano, son ahora un regalo para el turismo y un deleite de los sentidos para el visitante.

La visita a las islas.- Vigo y Pontevedra son dos buenos puntos de partida para estas excursiones, no los únicos. En ambas poblaciones y su inmediato entorno, su notable acumulación patrimonial ofrece amplia oferta complementaria al encanto de las islas. Hay barcos de servicio público que llevan a embarcaderos en islas principales. En Ons hay un camping. Si el tiempo es bueno, las encantadoras playas, de blanca y fina arena nos trasportan en la imaginación a las idílicas orillas del Caribe. Y, el Excursionismo a pie en las islas -paso a paso como la mejor manera de conocer el medio natural y disfrutar de la observación de la vegetación y de las aves-, cuenta con la base de un entramado senderista bien resuelto, de caminos de uso libre, señalizados y documentados con mesas de lectura del paisaje. Recorridos fáciles y que es aconsejable estén precedidos por la visita a los centros de interpretación que ayudan a una mejor comprensión del mundo que se abre ante nuestros pasos. Otras actividades, más selectivas, son posibles, tales como la navegación a vela y el buceo.

Archipiélago de Cíes.- El relieve de las islas Cíes tipifica expresivamente la peculiaridad en la posición de las islas y su relieve característico a dos vertientes contrapuestas en su orientación. Por un lado la fachada a Poniente, a mar abierto, con acantilados hasta de 150 metros de altura. Y la opuesta, más suave mirando hacia la Ría de Vigo, con delicadas playas abrigadas en forma de media luna, de blanca, limpia arena y aguas sosegadas. Restos de un castro y las ruinas de un monasterio, tres faros y un antiguo poblado, son legados humanos de la difícil permanencia en el rigor climático del Atlántico. La isla principal cuenta con un camping y restaurante, y encantadoras y fáciles rutas senderistas señalizadas que llevan a los puntos de mayor valor paisajístico, de observación de las aves y hasta su punto más elevado, 175 metros sobre el nivel del mar en el Faro de Cíes.

Archipiélago de Ons.- Es el de mayor superficie del conjunto del Parque y único que cuenta con una población permanente, muy reducida y subordinada básicamente en su subsistencia al turismo, manteniendo, no obstante, las viejas tareas artesanales de campo y pesca, pero ya solamente de manera testimonial. Está frente a la Ría de Pontevedra, es de escasa altura y su relieve interior más suave, difiere de las Cíes, con terrazas que han permitido su uso agrícola, labrantíos de subsistencia, dedicados preferentemente a los cereales, maíz y patatas, productos complementario de las actividades pesqueras en las frugales economías domésticas de los isleños. Sus habitantes siempre fueron muy pocos, enfrentados a recursos muy limitados por la adversidad climática y el aislamiento. Se agrupan en aisladas casitas bajas de techo para mejor resistir la fuerza de los vendavales y, también, por esta razón, ubicadas a sotavento, cara hacia la Ría de Vigo. Casas muy sencillas de una sola planta, y entre las casas y los campos, exentos, los pintorescos hórreos, convertidos en la actualidad en auxiliares de las viviendas, una vez que su antigua función de preservar los alimentos de los roedores y de la humedad, se ha hecho innecesaria. Allí está el Centro de Interpretación del Archipiélago, junto a las casas y ante la playa y embarcadero. Antiguas embarcaciones de los lugareños, ahora varadas, fueron auxiliares imprescindibles ante un medio proveedor básico de la dieta isleña. Unas embarcaciones peculiares de fondo plano y cortante proa, la Dorna, según la denominación local, una herencia en su diseño de las naves normandas y vikingas, adaptadas por los naturales en sus artes de pesca y hoy un testimonio de la alternancia de la agricultura con los trabajos del mar.

Archipiélago de Sálvora.- Con formas predominantes de granito redondeadas por la erosión del viento y del agua, la irregularidad de su relieve se manifiesta en un conjunto de islotes que contrasta con el paisaje relativamente plano de la isla de Sálvora, la más grande, situada a la entrada de la Ría de Arousa. Al norte de la isla hay un pueblo abandonado.

Archipiélago de Cortegada.- El conjunto de islotes e islas es de relieve suave y, por su posición en el interior de la Ría de Arousa, frente la desembocadura del río Ulla y sin la influencia del mar abierto, difiere del resto de archipiélagos componentes del Parque, claramente posicionados ante el extenso océano. Esta situación menos expuesta a la violencia del mar y sus fuertes corrientes, en el encuentro de sosegadas aguas marinas y dulces del río, ha inducido otras manifestaciones de vida subacuática que, unido a la proximidad a tierra y más cómodo acceso, se han integrado en las explotaciones pesqueras de la ría.

Rafael Cebrián Gimeno.

32 CONGRESO DE FEPET EN ANDORRA

El Principado de Andorra es el único país de todo el mundo con dos jefes de Estado, peculiaridad que surge de la figura medieval de los “Pariatges”. Los Copríncipes son el Obispo de Urgell y el Presidente de la República Francesa, que representan al pueblo andorrano a título personal y exclusivo. El 14 de marzo de 1993, con la firma de la primera Constitución escrita, el Principado se convirtió en un Estado de Derecho, democrático y social.

Hasta los años 60, los ejes de la economía tradicional fueron la agricultura y la ganadería, que desde entonces, y ante la avasalladora competencia del turismo, han pasado a emplear sólo el 0’36 por 100 de la población asalariada.

Pero el turismo precisa una constante adaptación a la demanda, y una contínua puesta en marcha de nuevos atractivos. Para contribuir a ello, la Administración Pública de Andorra ha patrocinado la celebración, del 9 al 11 de junio de 2011, del Congreso de los periodista turísticos, con el lema “Turismo de montaña, compras y congresos”, que tuvo lugar, precisamente en el modernísimo Centro de Congresos de Andorra la Vella.

Las autoridades andorranas dedicaron a los congresistas toda clase de atenciones, y al inicio del Congreso el recibimiento a los asistentes se produjo con la presencia personal de Hble. Sr. D. Francesc Camps Torres, Ministro de Turismo y Medio Ambiente; por la Hble. Sra. Dª. Maite Cano  Franco, Consellera Delegada de Cultura y Turismo del Comú de Andorra la Vella, y de D. Alexandre Andrés, Gerente de “Andorra Turismo”.

A continuación se inició un turno de ponencias en el que intervinieron Dª Noemí Pedra, Directora de marketing, con la ponencia “Todo un mundo en un pequeño país”; Dª Soraya Valls, Coordinadora de Convention Bureau, con  la ponencia “Andorra, destino de Congresos”; y D. Ricardo Masegosa, Director de Naturlandia, con la ponencia “Naturlandia, ejemplo de turismo de aventura”.

Después de un breve descanso tuvo lugar una mesa redonda, en la que intervinieron D. Jordí Pérez, director de “La Mañana”, de Lleida; D. Joan Cal, Director de “Segre”, Lleida; D. Juan Ramón Baiges, Director del “Periódico d´Andorra”; D. Ricard Poy, Director del “Diari d´Andorra”; y D. Paco Ruano, de la TV d’Andorra. En ella se expusieron las fortalezas y debilidades del turismo andorrano, destacando las grandes posibilidades del mismo como industria.

To ello tuvo lugar en el antes citado Centre de Congresos de Andorra la Vella, situado en el centro neurálgico de la ciudad y en una posición inmejorable, siendo el marco idóneo para celebrar todo tipo de actos: conferencias, congresos, reuniones, seminarios o espectáculos. Tiene una superficie de 2.400 metros cuadrados distribuídos en varias instalaciones, como por ejemplo, un auditorio, cinco salas funcionales, una sala de reuniones y una cocina con servicio de restauración. El auditorio, con capacidad para 900 espectadores, se puede transformar fácilmente en una sala de trabajo para 400 personas con mesas y butacas, conexiones eléctricas, multimedia, traducción simultánea y equipamientos de última generación. También tiene un espacio polivalente de 570 metros cuadrados, convertible en cuatro salas con capacidad para 50 o 100 personas.

Francisco Gregori

Ademuz; El rincón de la biodiversidad valenciana.

El Rincón de Ademuz es una comarca valenciana enclavada entre las comunidades castellana y aragonesa. Pese a ser poblada desde antiguo, como atestiguan los restos arqueológicos de origen Íbero encontrados en la localidad de Castielfabib, lo quebrado de su orografía y la dureza de su clima, condicionó cierto aislamiento que ha favorecido que en la actualidad la comarca siga respirando ese aire rural ya perdido en otras zonas. Alejada del desarrollismo desmedido, el Rincón de Ademuz es soporte de una naturaleza intacta en muchos lugares de su territorio. Consecuencia de la salud de sus montes, es la creación en el año 2.007 por la Conselleria de Medi Ambient del parque natural de la Puebla de San Miguel. 6.390 ha de naturaleza salvaje en la que entre sus extensos pinares de halepo (pinus halepensis) y rodeno (pinus pinaster) destacan los relictos bosques de sabinas (Juniperus thurifera). Pero de todos los parajes adscritos al parque natural hay dos que destacan por su singularidad. Uno de ellos el conocido como “Las Blancas”, un bosque de sabinas milenarias, quizás el más antiguo de la península y probablemente del mundo, con ejemplares de tronco inabarcable datados en torno a los 800 y 1.000 años de edad. El otro paraje dentro de este magnífico parque natural digno de mención es el “Alto de las Barracas” o “Cerro Calderón”, que con sus 1.839 m sin duda representa el techo de la Comunidad Valenciana. Debido a su altitud y características climáticas, en los alrededores de este cerro se da uno de los escasos bosques de pino silvestre (Pinus silvestris), de bellísima corteza rojiza, que podemos recorrer en tierras valencianas. No podemos cerrar este capítulo sobre naturaleza de la comarca del Rincón de Ademuz sin hablar de sus ríos. El Turia como arteria principal a la que conectan dos de sus afluentes, el Ebrón y el Boilgues. La sombra de hermosas alamedas (Populus sp.) acompañarán al caminante que decida recorrer sus vegas, cosa especialmente recomendable en otoño, época en la que los ocres, rojos, amarillos y verdes de los caducifolios pintan de color choperas y olmedas. Y con suerte, en los ribazos más recónditos del Boilgues, el viajero todavía podrá observar a la casi extinta nutria (Lutra lutra) que tiene aquí uno de los últimos reductos valencianos. Ciervos, corzos, gamos, zorros, gatos monteses, ginetas y todo un elenco de micromamíferos y aves forestales completan la biodiversidad de la comarca, llamando en especial la atención las grandes veleras aladas; las rapaces. Buitres, Águilas reales, Águilas perdiceras y calzadas, ratoneros, halcones, azores y muchas otras especies, coronan los limpios cielos del Rincón de Ademuz a la búsqueda de sus presas favoritas, los ya escasos conejos de monte.

Pero toda esta biodiversidad y bellezas naturales, en los tiempos que corren en los que parece que la naturaleza tuviera un papel secundario en lo referente a inversiones económicas que son desviadas a otros sectores, se ve en esta comarca respaldada por la ardua labor de asociaciones locales como la asociación “Albar” dedicada al mantenimiento de la biodiversidad en el Rincón de Ademuz. Algunos de sus proyectos más destacados son la recuperación del conejo de monte (Oryctolagus cuniculus), fundamental para restablecer las cadenas tróficas ya que esta especie se encuentra en la base alimentaria del ecosistema. Su rarefacción, a causa de las enfermedades y la caza abusiva, ha motivado la escasez de sus depredadores como las rapaces antes mencionadas. Otras labores de interés ambiental para la comarca han sido la creación de microreservas de flora y la recuperación de variedades locales de tomates, hortalizas y manzanos, con 5 variedades autóctonas ya en cultivo, apostando por una agricultura sostenible. En este sentido destaca también la actividad que desempeña la Cooperativa Agrícola y Ganadera de Castielfabib (CEAGA), destacando por su apuesta en el campo de la agricultura y ganaderías ecológicas y el turismo rural sostenible a través del complejo de turismo “Los centenares” en Castielfabib, donde es posible realizar actividades como el senderismo, barranquismo, espeleología, agroturismo o interesantísimos cursos de micología en las épocas favorables. Todas estas actividades, llevadas a cabo de una manera racional y acompañadas de una adecuada gestión, en la que prime la conservación del entorno, serán sin duda el soporte del bienestar económico de sus gentes y de la pervivencia de una comarca única, a largo plazo.

Javier Marcos

Sabinas

CAPRICHOS DE ANTONIO TOMÁS EN EL MUSEO GONZÁLEZ MARTÍ

CAPRICHOS DE ANTONIO TOMÁS EN EL MUSEO GONZÁLEZ MARTÍ

El Museo de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí exhibe desde el pasado 15 de abril y hasta el 3 de julio, la exposición “Antonio Tomás. Caprichos: pinturas, dibujos, grabados y cerámicas”, comisariada por Felipe Garín, antaño director de esta casa.

Son una treintena de obras elaborados en el 2010 por este artista doctor y catedrático de Bellas Artes y galardonado en muchos concursos, certámenes y exposiciones nacionales e internacionales, que ha regresado a este santuario del arte cincuenta y cinco años después.
Ha empleado diversas disciplinas pertenecientes al lenguaje plástico como la pintura, el grabado y la cerámica y elaboradas con diferentes modalidades: las gráficas, mediante planchas-matrices de cobres ejecutadas al aguafuerte y buril e iluminadas a mano; las plásticas, con soporte-tablero de madera empleando lápiz de grafito, a la cera, pastel, acrílico; las cerámicas, modeladas a distintas temperaturas de cocción, pastas y
decoración (óxidos, esmaltes, engobes).
El tema de la muestra es el universo femenino, diferenciada en varias series: las ménades danzando (personajes femeninos de la antigua Grecia inspiradas en la Ménade del escultor Scopas del s. IV a.C), modelos en poses publicitarias, pasarelas por el bombardeo de imágenes por la televisión y prensa del corazón.

Silvia Gonzalo

Video con fotografias de la Comunidad Valenciana

Nuestro compañero Luis Calvente nos presenta Objetivo Valencia, un grupo formado por 3 fotografos valencianos el que ademas de vender fotografia de autor imparten cursos de fotografia de distintos niveles.

Adjuntamos uno de los audiovisuales promocionales con algunos de sus trabajos mas destacados de la Comunidad Valenciana:

Os aconsejamos reproducirlo en Youtube en HD (720 p.), a pantalla completa y con el volumen bien alto. La banda sonora es de Roger Suribana.

Esperamos que os gusten.

Premio Caballero Gastronomico

El pasado dia 21 de Febrero , se celebraron las XVI jornadas gastronómicas de la matanza del cerdo celebradas en el restaurante Ganero en Serra. A nuetro compañero Celestino Ricote Manjón, perteneciente a la Asociación Valenciana de periodistas y escritores de turismo, le concedierón el galardón de Caballeros Gastronómicos de la Matanza 2011.

Tony Sanchis

AVPYETUR EN LA 7ª FERIA INTERNACIONAL DE TURISMO DE LA COMUNITAT VALENCIANA

AVPYETUR EN LA 7ª FERIA INTERNACIONAL DE TURISMO DE LA COMUNITAT VALENCIANA

La Asociación Valenciana de Periodistas y Escritores de Turismo (AVPYETUR) ha participado con un pequeño stand en la 7ª edición de la Feria Internacional de Turismo de la Comunitat Valenciana, certamen realizado en el recinto ferial de Valencia los días 25, 26 y 27 de febrero.
Nuestro stand estaba ubicado en el Pabellón 2 nivel 2, rodeado por el de otras comunidades autónomas y otros países, y con animación  constante debido, mayoritariamente, al impacto de las fotografías con las que estaba decorado – Premios Cavanilles de Turismo 2009 y 2010-, las peticiones de información y la entrega masiva y gratuita de la nueva guía de turismo de la Comunitat Valenciana en edición cuatrilingüe (español, inglés, alemán e italiano).
Participación ferial que tuvo un hito importante, la presentación el sábado día 26 de la guía “Caminando por el Alto Mijares” de la que es autor el escritor Rafael Cebrián Gimeno de esta Asociación. Tras la presentación por quien esto suscribe, el también escritor José Soler Carnicer resaltó la gran labor divulgadora del autor y su minuciosidad descriptiva de la geografía vivida. Seguidamente Rafael Cebrián comentó a grandes trazos el contenido de la guía y el marco geográfico e histórico de la comarca referida.

Asimismo, el stand fue un importante lugar de encuentro tanto de asociados de AVPYETUR como de otros colectivos interesados en lo que realizamos en pro del turismo en general y de la Comunitat Valenciana en particular.

Esteban Gonzalo

CICLO PINTURAS RUPESTRES: El arte rupestre en el turismo rural

El conjunto de arte rupestre del Arco Mediterráneo Peninsular fue declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, distinción que avala la magnitud de tan valioso legado. La vivacidad expresiva, la estética y la narrativa de las pinturas rupestres son el testimonio documental más antiguo y sorprendente de la vida cotidiana del hombre prehistórico. Su admirable legado conforma un impresionante patrimonio de gran riqueza en nuestras montañas. Arte y paisaje se complementan en creaciones pictóricas inspiradas en escenarios físicos naturales y la fauna salvaje que lo habitaba, decoraciones que ayudan a la comprensión de sociedades pertenecientes a nuestro más remoto pasado, condicionadas en su existencia por los ciclos naturales.

Con la finalidad de dar a conocer este patrimonio excepcional y dentro de una continuada programación cultural llevada a cabo por el Centro Excursionista de Valencia sobre el rico legado de nuestros antecesores depositado en el medio rural, he desarrollado un ciclo de tres salidas escogidas, culturales y paisajísticas de gran contenido y que suponen la aproximación excursionista a la turbadora singularidad del arte rupestre del Mediterráneo Occidental. El pasado sábado, 19 de los corrientes, finalizó el ciclo iniciado en noviembre del pasado año de tres visitas a lugares destacados del arte rupestre en nuestra Comunidad. Tres auténticos santuarios de esta conmovedora expresión plástica, entre los muchos enclaves existentes en nuestras montañas: el Pla de Petracos, en Castell de Castells (Alicante); Las Cuevas de la Araña, en Bicorp (Valencia ) y La Valltorta, en Tirig (Castelló). Tres lugares excepcionales de nuestros orígenes que cuentan, en las localidades respectivas, con museos y centros de interpretación, de cuya calidad e irreprochable exposición nos podemos felicitar por su aportación cultural a nuestra sociedad.

EL PLA DE PETRACOS

Arte Macroesquemático en el corazón de la montaña alicantina.

El Pla de Petracos agrupa el más impresionantes testimonio del arte rupestre Macroesquemático, titulado de esta manera por la notable dimensión de las figuras representadas. El frente rocoso de acantilados elevado sobre el barranc de Malafí, donde se abren numerosas cavidades en forma de nicho, es el espacio que reúne un fascinante conjunto de figuras humanas. Un verdadero santuario, cronológicamente situado en la cultura neolítica de los primeros agricultores y ganaderos, y que muestra un horizonte espiritual expresado en la escenografía de las representaciones, figuras orantes interpretadas como ritual mágico invocando la bondad de las cosechas. Nos encontramos ante una escenografía artística asociada a un cambio fundamental en la sociedad humana, material y espiritual, cuando la economía agropecuaria confiere estabilidad al grupo humano y asegura su subsistencia fuera de la incertidumbre y riesgos de la caza como medio de vida de las culturas precedentes. El Pla de Petracos, habitado hasta hace unas tres décadas por un pequeño caserío, fue escenario de uno de los episodios más sangrientos de la represión perpetrada a los moriscos cuando fue promulgado el decreto de expulsión en 1609. Los tercios de Nápoles y Sicilia, tropas de elite, profesionales de la guerra, tomaron la zona como punto de acoso a la rebelión morisca acantonada en las montañas centrales de La Marina. Varios miles de moriscos muertos en este lugar y los supervivientes obligados al exilio en penosas circunstancias, escriben el epílogo de la tragedia de los musulmanes valencianos, de “los otros valencianos”.

El Museo de Castell de Castell: La interesante excursión al Pla de Petracos, donde tanto de nuestro pasado se atesora, tiene su adecuado complemento en Castell de Castells, el municipio en cuyo término está Petracos, con la visita a su interesante y bien documentado museo municipal, representativo de la cultura material de las economías tradicionales y una didáctica exposición del conjunto rupestre del Pla de Petracos. Contiene una colección etnográfica de enseres, muebles y útiles de las sociedades rurales, todo ello ambientado en una casa del municipio, conservada con sus dependencias, bodega, almacén de aceite, grano…, además de un conjunto de viejas fotografías referidas a los habitantes de la población. En la planta superior de la casa, paneles y dibujos documentan la etapa cultural de Petracos, donde se proyecta una audiovisual, en gran pantalla y de excelente ejecución, sobre el santuario rupestre.

LAS CUEVAS DE LA ARAÑA

Arte prehistórico en el corazón del Macizo del Caroig

En el desierto e inmenso Macizo del Caroig, surcado por el profundo y cautivador entramado de bellos corredores fluviales, se encuentra el mayor conjunto de arte rupestre de nuestra Comunidad. De tan notable patrimonio, las Cuevas de la Araña, es, sin duda, el mayor exponente de tan sugestivo horizonte artístico y cultural, uno de los más importantes del arte rupestre en nuestro país y de gran alcance en el ámbito internacional. Las secuencias y escenografía de las decoraciones de las cuevas, es la síntesis de un paisaje y crónica del hombre ante el medio natural inalterado que conformaba su espacio vital y social, un medio de cuyos ciclos formaba parte el grupo errante de cazadores y artistas. El propio enclave de las pinturas, las cavidades sobre el estrechamiento y la cascada del barranco Hongares, ya constituyen un buen motivo excursionista y de reflexión sobre el relieve ante el cual nuestros lejanos antecesores se enfrentaban en su cotidiana lucha por la supervivencia. Medio físico y exuberante vegetación enmarcan este cautivador paraje. La escena más conocida y que mayor celebridad ha otorgado a La Araña, es la famosa secuencia de la recolección de la miel, una relevante y expresiva composición narrativa, entre las más notables del Arte Rupestre del Levante y conocida en el mundo entero, testimonio excepcional de la vida de pueblos de la Prehistoria en las sociedades de cazadores y recolectores, en una etapa que los investigadores sitúan en sus postrimerías, en los preámbulos del Neolítico. Otras escenas, distribuidas en las tres covachas del conjunto, siguen siendo motivo de investigación y análisis en la evolución social de uno de los momentos estelares del arte rupestre levantino,

La Acequia de los Moros, nombre de una canalización musulmana tallada en la piedra viva, abierta en la confluencia del barranco de Hongares, donde están las cuevas, y el río Cazuma. Un azud captaba las aguas del arroyo y las dirigía en un largo recorrido por la canalización de varios kilómetros para su utilización para el riego, huertas y pequeñas hoyas de tierra agrícola, en la actualidad abandonadas, otrora oasis de verdor que el agua fructificaba, un precioso testimonio de la industria musulmana y de su elaborada cultura del agua

El museo de Bicorp.-Esta pequeña población de la Canal de Navarrés, en el Macizo del Caroig, cuenta con un estimable museo de reciente inauguración. Un edificio de la población, en mitad del casco urbano, es la sede del museo, con tres plantas dedicadas a tres exponentes patrimoniales del municipio: el arte rupestre; una colección etnográfica de enseres, útiles y documentos de la sociedad tradicional y la huella de los diplodocus, la documentación sobre los varios yacimientos de la colosal fauna que pobló estas tierras hace 60 millones de años. En suma, una magnifica exposición y una estimable aportación cultural que bien vale la pena visitar.

LA VALLTORTA

Paisajes del Maestrat y arte rupestre

El barranc de la Valltorta.- El barranc de la Valltorta abre su sinuoso curso en la orografía septentrional de Castelló, en el corazón del legendario Maestrat, formando parte de un conjunto de barrancos y ramblas de cauces erosivos. En esta red fluvial que caracteriza a la circulación hídrica de las comarcas extremas de nuestras tierras lindantes con Aragón, la Valltorta es un expresivo ejemplo del agua como activo agente modelador del relieve, de curso con meandros encajados y desviado con frecuencia por largos estribos y muelas rocosas que le ha valido el expresivo topónimo descriptivo. En este dinámico paisaje geológico se inscribe la huella del hombre, un marco geográfico que alberga en la Valltorta uno de los legados más valiosos de la interrelación del hombre con el medio natural, en las decoraciones rupestres, de sorprendente pureza y realismo: el testimonio vital y la narrativa gráfica de un universo de cazadores.

En sus rocosas y escarpadas vertientes se abre un rosario de cavidades erosivas, de formas lenticulares, ovaladas y de escasa profundidad y que fueron los espacios escogidos por los artistas prehistóricos. Hasta un total de 26 abrigos decorados son conocidos en la cuenca del barranco. Dos visitas a cavidades decoradas, son las únicas posibles, dentro de una normativa de estricta protección, visitas que obligadamente se han de hacer acompañados por guías especialistas del museo, por otra parte, única forma de acceder a las cavidades decoradas y que están cercadas por una valla metálica protectora. Sujetos a la programación del museo, se puede ver la Cova dels Cavalls y la Cova del Civil. Emocionantes secuencias de caza y de lucha, entre 100 y 200 figuras entre arqueros, cabras, ciervos y otras especies de la fauna salvaje del momento. Es necesario adelantar que el Centro de Interpretación del Museo, aproxima al visitante la totalidad del patrimonio de la Valltorta, con sus ejemplares instalaciones que permite la completa interiorización de este sorprendente y notable exponente del primitivo arte pictórico.

El Museo de la Valltorta.- En este singular y notable museo se ha materializado un proyecto de protección integral de la zona y su relevante patrimonio, para preservar los abrigos decorados y, como centro de interpretación, cumplir la función divulgadora de un legado cultural que de forma tan emotiva y singular ha merecido de la UNESCO la distinción de Patrimonio de la Humanidad. Las instalaciones son modélicas, con una detallada información documental del universo artístico de La Valltorta y noticia de otros lugares comunitarios, igualmente notables, tales como Petracos y La Araña, mediante paneles, vídeo y la réplica de la Cova dels Cavalls y todo su intenso conjunto de vivaces figuras. La visita al museo y las cavidades decoradas, acompañados de un experto del museo, son gratuitas. Respeto, sensibilidad y verdadera estima de nuestra cultura es lo que transmiten instalaciones como este ejemplar museo y su proyección hacia el ciudadano.

Rafael Cebrián Gimeno


El conjunto de arte rupestre del Arco Mediterráneo Peninsular fue declarado por
la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, distinción que avala la magnitud de
tan valioso legado. La vivacidad expresiva, la estética y la narrativa de las pinturas
rupestres son el testimonio documental más antiguo y sorprendente de la vida cotidiana
del hombre prehistórico. Su admirable legado conforma un impresionante patrimonio
de gran riqueza en nuestras montañas. Arte y paisaje se complementan en creaciones
pictóricas inspiradas en escenarios físicos naturales y la fauna salvaje que lo habitaba,
decoraciones que ayudan a la comprensión de sociedades pertenecientes a nuestro más
remoto pasado, condicionadas en su existencia por los ciclos naturales.

Con la finalidad de dar a conocer este patrimonio excepcional y dentro de una
continuada programación cultural llevada a cabo por el Centro Excursionista de
Valencia sobre el rico legado de nuestros antecesores depositado en el medio rural,
he desarrollado un ciclo de tres salidas escogidas, culturales y paisajísticas de gran
contenido y que suponen la aproximación excursionista a la turbadora singularidad
del arte rupestre del Mediterráneo Occidental. El pasado sábado, 19 de los corrientes,
finalizó el ciclo iniciado en noviembre del pasado año de tres visitas a lugares
destacados del arte rupestre en nuestra Comunidad. Tres auténticos santuarios de esta
conmovedora expresión plástica, entre los muchos enclaves existentes en nuestras
montañas: el Pla de Petracos, en Castell de Castells (Alicante); Las Cuevas de la Araña,
en Bicorp (Valencia ) y La Valltorta, en Tirig (Castelló). Tres lugares excepcionales de
nuestros orígenes que cuentan, en las localidades respectivas, con museos y centros de
interpretación, de cuya calidad e irreprochable exposición nos podemos felicitar por su
aportación cultural a nuestra sociedad.

EL PLA DE PETRACOS
Arte Macroesquemático en el corazón de la montaña alicantina.

El Pla de Petracos agrupa el más impresionantes testimonio del arte rupestre
Macroesquemático, titulado de esta manera por la notable dimensión de las figuras
representadas. El frente rocoso de acantilados elevado sobre el barranc de Malafí,
donde se abren numerosas cavidades en forma de nicho, es el espacio que reúne un
fascinante conjunto de figuras humanas. Un verdadero santuario, cronológicamente
situado en la cultura neolítica de los primeros agricultores y ganaderos, y que muestra
un horizonte espiritual expresado en la escenografía de las representaciones, figuras
orantes interpretadas como ritual mágico invocando la bondad de las cosechas. Nos
encontramos ante una escenografía artística asociada a un cambio fundamental en la
sociedad humana, material y espiritual, cuando la economía agropecuaria confiere
estabilidad al grupo humano y asegura su subsistencia fuera de la incertidumbre y
riesgos de la caza como medio de vida de las culturas precedentes. El Pla de Petracos,
habitado hasta hace unas tres décadas por un pequeño caserío, fue escenario de uno
de los episodios más sangrientos de la represión perpetrada a los moriscos cuando fue
promulgado el decreto de expulsión en 1609. Los tercios de Nápoles y Sicilia, tropas
de elite, profesionales de la guerra, tomaron la zona como punto de acoso a la rebelión
morisca acantonada en las montañas centrales de La Marina. Varios miles de moriscos

muertos en este lugar y los supervivientes obligados al exilio en penosas circunstancias,
escriben el epílogo de la tragedia de los musulmanes valencianos, de “los otros
valencianos”.

El Museo de Castell de Castell: La interesante excursión al Pla de Petracos, donde
tanto de nuestro pasado se atesora, tiene su adecuado complemento en Castell de
Castells, el municipio en cuyo término está Petracos, con la visita a su interesante
y bien documentado museo municipal, representativo de la cultura material de las
economías tradicionales y una didáctica exposición del conjunto rupestre del Pla
de Petracos. Contiene una colección etnográfica de enseres, muebles y útiles de las
sociedades rurales, todo ello ambientado en una casa del municipio, conservada con sus
dependencias, bodega, almacén de aceite, grano…, además de un conjunto de viejas
fotografías referidas a los habitantes de la población. En la planta superior de la casa,
paneles y dibujos documentan la etapa cultural de Petracos, donde se proyecta una
audiovisual, en gran pantalla y de excelente ejecución, sobre el santuario rupestre.

LAS CUEVAS DE LA ARAÑA
Arte prehistórico en el corazón del Macizo del Caroig

En el desierto e inmenso Macizo del Caroig, surcado por el profundo y cautivador
entramado de bellos corredores fluviales, se encuentra el mayor conjunto de arte
rupestre de nuestra Comunidad. De tan notable patrimonio, las Cuevas de la Araña,
es, sin duda, el mayor exponente de tan sugestivo horizonte artístico y cultural, uno de
los más importantes del arte rupestre en nuestro país y de gran alcance en el ámbito
internacional. Las secuencias y escenografía de las decoraciones de las cuevas, es
la síntesis de un paisaje y crónica del hombre ante el medio natural inalterado que
conformaba su espacio vital y social, un medio de cuyos ciclos formaba parte el grupo
errante de cazadores y artistas. El propio enclave de las pinturas, las cavidades sobre
el estrechamiento y la cascada del barranco Hongares, ya constituyen un buen motivo
excursionista y de reflexión sobre el relieve ante el cual nuestros lejanos antecesores
se enfrentaban en su cotidiana lucha por la supervivencia. Medio físico y exuberante
vegetación enmarcan este cautivador paraje. La escena más conocida y que mayor
celebridad ha otorgado a La Araña, es la famosa secuencia de la recolección de la
miel, una relevante y expresiva composición narrativa, entre las más notables del Arte
Rupestre del Levante y conocida en el mundo entero, testimonio excepcional de la
vida de pueblos de la Prehistoria en las sociedades de cazadores y recolectores, en una
etapa que los investigadores sitúan en sus postrimerías, en los preámbulos del Neolítico.
Otras escenas, distribuidas en las tres covachas del conjunto, siguen siendo motivo de
investigación y análisis en la evolución social de uno de los momentos estelares del arte
rupestre levantino,

La Acequia de los Moros, nombre de una canalización musulmana tallada en la piedra
viva, abierta en la confluencia del barranco de Hongares, donde están las cuevas, y el río
Cazuma. Un azud captaba las aguas del arroyo y las dirigía en un largo recorrido por la
canalización de varios kilómetros para su utilización para el riego, huertas y pequeñas
hoyas de tierra agrícola, en la actualidad abandonadas, otrora oasis de verdor que el
agua fructificaba, un precioso testimonio de la industria musulmana y de su elaborada
cultura del agua

El museo de Bicorp.-Esta pequeña población de la Canal de Navarrés, en el Macizo

del Caroig, cuenta con un estimable museo de reciente inauguración. Un edificio de la
población, en mitad del casco urbano, es la sede del museo, con tres plantas dedicadas a
tres exponentes patrimoniales del municipio: el arte rupestre; una colección etnográfica
de enseres, útiles y documentos de la sociedad tradicional y la huella de los diplodocus,
la documentación sobre los varios yacimientos de la colosal fauna que pobló estas
tierras hace 60 millones de años. En suma, una magnifica exposición y una estimable
aportación cultural que bien vale la pena visitar.

LA VALLTORTA
Paisajes del Maestrat y arte rupestre

El barranc de la Valltorta.- El barranc de la Valltorta abre su sinuoso curso en la
orografía septentrional de Castelló, en el corazón del legendario Maestrat, formando
parte de un conjunto de barrancos y ramblas de cauces erosivos. En esta red fluvial
que caracteriza a la circulación hídrica de las comarcas extremas de nuestras tierras
lindantes con Aragón, la Valltorta es un expresivo ejemplo del agua como activo agente
modelador del relieve, de curso con meandros encajados y desviado con frecuencia por
largos estribos y muelas rocosas que le ha valido el expresivo topónimo descriptivo. En
este dinámico paisaje geológico se inscribe la huella del hombre, un marco geográfico
que alberga en la Valltorta uno de los legados más valiosos de la interrelación del
hombre con el medio natural, en las decoraciones rupestres, de sorprendente pureza y
realismo: el testimonio vital y la narrativa gráfica de un universo de cazadores.

En sus rocosas y escarpadas vertientes se abre un rosario de cavidades erosivas, de
formas lenticulares, ovaladas y de escasa profundidad y que fueron los espacios
escogidos por los artistas prehistóricos. Hasta un total de 26 abrigos decorados son
conocidos en la cuenca del barranco. Dos visitas a cavidades decoradas, son las únicas
posibles, dentro de una normativa de estricta protección, visitas que obligadamente
se han de hacer acompañados por guías especialistas del museo, por otra parte, única
forma de acceder a las cavidades decoradas y que están cercadas por una valla metálica
protectora. Sujetos a la programación del museo, se puede ver la Cova dels Cavalls y
la Cova del Civil. Emocionantes secuencias de caza y de lucha, entre 100 y 200 figuras
entre arqueros, cabras, ciervos y otras especies de la fauna salvaje del momento. Es
necesario adelantar que el Centro de Interpretación del Museo, aproxima al visitante la
totalidad del patrimonio de la Valltorta, con sus ejemplares instalaciones que permite
la completa interiorización de este sorprendente y notable exponente del primitivo arte
pictórico.

El Museo de la Valltorta.- En este singular y notable museo se ha materializado un
proyecto de protección integral de la zona y su relevante patrimonio, para preservar los
abrigos decorados y, como centro de interpretación, cumplir la función divulgadora de
un legado cultural que de forma tan emotiva y singular ha merecido de la UNESCO
la distinción de Patrimonio de la Humanidad. Las instalaciones son modélicas, con
una detallada información documental del universo artístico de La Valltorta y noticia
de otros lugares comunitarios, igualmente notables, tales como Petracos y La Araña,
mediante paneles, vídeo y la réplica de la Cova dels Cavalls y todo su intenso conjunto
de vivaces figuras. La visita al museo y las cavidades decoradas, acompañados de un
experto del museo, son gratuitas. Respeto, sensibilidad y verdadera estima de nuestra
cultura es lo que transmiten instalaciones como este ejemplar museo y su proyección
hacia el ciudadano.

Rafael Cebrián GimenoEl conjunto de arte rupestre del Arco Mediterráneo Peninsular fue declarado por
la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, distinción que avala la magnitud de
tan valioso legado. La vivacidad expresiva, la estética y la narrativa de las pinturas
rupestres son el testimonio documental más antiguo y sorprendente de la vida cotidiana
del hombre prehistórico. Su admirable legado conforma un impresionante patrimonio
de gran riqueza en nuestras montañas. Arte y paisaje se complementan en creaciones
pictóricas inspiradas en escenarios físicos naturales y la fauna salvaje que lo habitaba,
decoraciones que ayudan a la comprensión de sociedades pertenecientes a nuestro más
remoto pasado, condicionadas en su existencia por los ciclos naturales.

Con la finalidad de dar a conocer este patrimonio excepcional y dentro de una
continuada programación cultural llevada a cabo por el Centro Excursionista de
Valencia sobre el rico legado de nuestros antecesores depositado en el medio rural,
he desarrollado un ciclo de tres salidas escogidas, culturales y paisajísticas de gran
contenido y que suponen la aproximación excursionista a la turbadora singularidad
del arte rupestre del Mediterráneo Occidental. El pasado sábado, 19 de los corrientes,
finalizó el ciclo iniciado en noviembre del pasado año de tres visitas a lugares
destacados del arte rupestre en nuestra Comunidad. Tres auténticos santuarios de esta
conmovedora expresión plástica, entre los muchos enclaves existentes en nuestras
montañas: el Pla de Petracos, en Castell de Castells (Alicante); Las Cuevas de la Araña,
en Bicorp (Valencia ) y La Valltorta, en Tirig (Castelló). Tres lugares excepcionales de
nuestros orígenes que cuentan, en las localidades respectivas, con museos y centros de
interpretación, de cuya calidad e irreprochable exposición nos podemos felicitar por su
aportación cultural a nuestra sociedad.

EL PLA DE PETRACOS
Arte Macroesquemático en el corazón de la montaña alicantina.

El Pla de Petracos agrupa el más impresionantes testimonio del arte rupestre
Macroesquemático, titulado de esta manera por la notable dimensión de las figuras
representadas. El frente rocoso de acantilados elevado sobre el barranc de Malafí,
donde se abren numerosas cavidades en forma de nicho, es el espacio que reúne un
fascinante conjunto de figuras humanas. Un verdadero santuario, cronológicamente
situado en la cultura neolítica de los primeros agricultores y ganaderos, y que muestra
un horizonte espiritual expresado en la escenografía de las representaciones, figuras
orantes interpretadas como ritual mágico invocando la bondad de las cosechas. Nos
encontramos ante una escenografía artística asociada a un cambio fundamental en la
sociedad humana, material y espiritual, cuando la economía agropecuaria confiere
estabilidad al grupo humano y asegura su subsistencia fuera de la incertidumbre y
riesgos de la caza como medio de vida de las culturas precedentes. El Pla de Petracos,
habitado hasta hace unas tres décadas por un pequeño caserío, fue escenario de uno
de los episodios más sangrientos de la represión perpetrada a los moriscos cuando fue
promulgado el decreto de expulsión en 1609. Los tercios de Nápoles y Sicilia, tropas
de elite, profesionales de la guerra, tomaron la zona como punto de acoso a la rebelión
morisca acantonada en las montañas centrales de La Marina. Varios miles de moriscos

muertos en este lugar y los supervivientes obligados al exilio en penosas circunstancias,
escriben el epílogo de la tragedia de los musulmanes valencianos, de “los otros
valencianos”.

El Museo de Castell de Castell: La interesante excursión al Pla de Petracos, donde
tanto de nuestro pasado se atesora, tiene su adecuado complemento en Castell de
Castells, el municipio en cuyo término está Petracos, con la visita a su interesante
y bien documentado museo municipal, representativo de la cultura material de las
economías tradicionales y una didáctica exposición del conjunto rupestre del Pla
de Petracos. Contiene una colección etnográfica de enseres, muebles y útiles de las
sociedades rurales, todo ello ambientado en una casa del municipio, conservada con sus
dependencias, bodega, almacén de aceite, grano…, además de un conjunto de viejas
fotografías referidas a los habitantes de la población. En la planta superior de la casa,
paneles y dibujos documentan la etapa cultural de Petracos, donde se proyecta una
audiovisual, en gran pantalla y de excelente ejecución, sobre el santuario rupestre.

LAS CUEVAS DE LA ARAÑA
Arte prehistórico en el corazón del Macizo del Caroig

En el desierto e inmenso Macizo del Caroig, surcado por el profundo y cautivador
entramado de bellos corredores fluviales, se encuentra el mayor conjunto de arte
rupestre de nuestra Comunidad. De tan notable patrimonio, las Cuevas de la Araña,
es, sin duda, el mayor exponente de tan sugestivo horizonte artístico y cultural, uno de
los más importantes del arte rupestre en nuestro país y de gran alcance en el ámbito
internacional. Las secuencias y escenografía de las decoraciones de las cuevas, es
la síntesis de un paisaje y crónica del hombre ante el medio natural inalterado que
conformaba su espacio vital y social, un medio de cuyos ciclos formaba parte el grupo
errante de cazadores y artistas. El propio enclave de las pinturas, las cavidades sobre
el estrechamiento y la cascada del barranco Hongares, ya constituyen un buen motivo
excursionista y de reflexión sobre el relieve ante el cual nuestros lejanos antecesores
se enfrentaban en su cotidiana lucha por la supervivencia. Medio físico y exuberante
vegetación enmarcan este cautivador paraje. La escena más conocida y que mayor
celebridad ha otorgado a La Araña, es la famosa secuencia de la recolección de la
miel, una relevante y expresiva composición narrativa, entre las más notables del Arte
Rupestre del Levante y conocida en el mundo entero, testimonio excepcional de la
vida de pueblos de la Prehistoria en las sociedades de cazadores y recolectores, en una
etapa que los investigadores sitúan en sus postrimerías, en los preámbulos del Neolítico.
Otras escenas, distribuidas en las tres covachas del conjunto, siguen siendo motivo de
investigación y análisis en la evolución social de uno de los momentos estelares del arte
rupestre levantino,

La Acequia de los Moros, nombre de una canalización musulmana tallada en la piedra
viva, abierta en la confluencia del barranco de Hongares, donde están las cuevas, y el río
Cazuma. Un azud captaba las aguas del arroyo y las dirigía en un largo recorrido por la
canalización de varios kilómetros para su utilización para el riego, huertas y pequeñas
hoyas de tierra agrícola, en la actualidad abandonadas, otrora oasis de verdor que el
agua fructificaba, un precioso testimonio de la industria musulmana y de su elaborada
cultura del agua

El museo de Bicorp.-Esta pequeña población de la Canal de Navarrés, en el Macizo

del Caroig, cuenta con un estimable museo de reciente inauguración. Un edificio de la
población, en mitad del casco urbano, es la sede del museo, con tres plantas dedicadas a
tres exponentes patrimoniales del municipio: el arte rupestre; una colección etnográfica
de enseres, útiles y documentos de la sociedad tradicional y la huella de los diplodocus,
la documentación sobre los varios yacimientos de la colosal fauna que pobló estas
tierras hace 60 millones de años. En suma, una magnifica exposición y una estimable
aportación cultural que bien vale la pena visitar.

LA VALLTORTA
Paisajes del Maestrat y arte rupestre

El barranc de la Valltorta.- El barranc de la Valltorta abre su sinuoso curso en la
orografía septentrional de Castelló, en el corazón del legendario Maestrat, formando
parte de un conjunto de barrancos y ramblas de cauces erosivos. En esta red fluvial
que caracteriza a la circulación hídrica de las comarcas extremas de nuestras tierras
lindantes con Aragón, la Valltorta es un expresivo ejemplo del agua como activo agente
modelador del relieve, de curso con meandros encajados y desviado con frecuencia por
largos estribos y muelas rocosas que le ha valido el expresivo topónimo descriptivo. En
este dinámico paisaje geológico se inscribe la huella del hombre, un marco geográfico
que alberga en la Valltorta uno de los legados más valiosos de la interrelación del
hombre con el medio natural, en las decoraciones rupestres, de sorprendente pureza y
realismo: el testimonio vital y la narrativa gráfica de un universo de cazadores.

En sus rocosas y escarpadas vertientes se abre un rosario de cavidades erosivas, de
formas lenticulares, ovaladas y de escasa profundidad y que fueron los espacios
escogidos por los artistas prehistóricos. Hasta un total de 26 abrigos decorados son
conocidos en la cuenca del barranco. Dos visitas a cavidades decoradas, son las únicas
posibles, dentro de una normativa de estricta protección, visitas que obligadamente
se han de hacer acompañados por guías especialistas del museo, por otra parte, única
forma de acceder a las cavidades decoradas y que están cercadas por una valla metálica
protectora. Sujetos a la programación del museo, se puede ver la Cova dels Cavalls y
la Cova del Civil. Emocionantes secuencias de caza y de lucha, entre 100 y 200 figuras
entre arqueros, cabras, ciervos y otras especies de la fauna salvaje del momento. Es
necesario adelantar que el Centro de Interpretación del Museo, aproxima al visitante la
totalidad del patrimonio de la Valltorta, con sus ejemplares instalaciones que permite
la completa interiorización de este sorprendente y notable exponente del primitivo arte
pictórico.

El Museo de la Valltorta.- En este singular y notable museo se ha materializado un
proyecto de protección integral de la zona y su relevante patrimonio, para preservar los
abrigos decorados y, como centro de interpretación, cumplir la función divulgadora de
un legado cultural que de forma tan emotiva y singular ha merecido de la UNESCO
la distinción de Patrimonio de la Humanidad. Las instalaciones son modélicas, con
una detallada información documental del universo artístico de La Valltorta y noticia
de otros lugares comunitarios, igualmente notables, tales como Petracos y La Araña,
mediante paneles, vídeo y la réplica de la Cova dels Cavalls y todo su intenso conjunto
de vivaces figuras. La visita al museo y las cavidades decoradas, acompañados de un
experto del museo, son gratuitas. Respeto, sensibilidad y verdadera estima de nuestra
cultura es lo que transmiten instalaciones como este ejemplar museo y su proyección
hacia el ciudadano.

Rafael Cebrián Gimeno

Imágenes de Fitur 2011

Imágenes de Fitur 2011 realizadas por nuestro compañero Paco Gironés.