El pasado 28 de Febrero al cruzar el vestíbulo de la estación València Nord vi la Sala de los Mosaicos además de iluminada y accesible para los visitantes con un cartel vertical en un hueco junto a una ventana acristalada. Entré y ví, con agradable sorpresa, que no es un cartel sino un magnífico compendio histórico y artístico del monumento nacional realizado con 29 fotografías acompañadas con referencias concisas y concretas desde que la estación fue proyectada en 1906 por el arquitecto valenciano Demetrio Ribes Marco como gran terminal para la Compañía de los Ferrocarriles del Norte de España, empezó su construcción en 1909 y la inauguraron el 8 de Agosto de 1917.
Textos donde destacan que la Compañía del Norte quiso que en la decoración del magnífico edificio el arquitecto resaltara la imagen de la velocidad en sus trenes, la atención al viajero y la seguridad, ésta especificada en las Guardesas de Día y de Noche, un trabajo ferroviario más importante de lo que generalizadamente se ha considerado. Rapidez, atención al viajero y seguridad, lo mismo que ahora publicitan para el AVE y otros trenes rápidos, pero entonces con las posibilidades técnicas del primer cuarto del siglo veinte.
Por ello, como los periodistas y escritores de turismo cuando observamos deficiencias, fallos o carencias en servicios y actividades turísticas requerimos su solución a las entidades responsables en nuestro afán de ayudar a la mejora de nuestra oferta, si posteriormente comprobamos que además de corregirlos añaden calidad informativa, como es el caso que nos ocupa, creemos que lo correcto es difundirlo para que sirva como ejemplo en situaciones parecidas.
Esteban Gonzalo